jueves, 27 de diciembre de 2007
Renaciendo... re-haciendo, re-conociendo!!!
martes, 25 de septiembre de 2007
¿Qué soy, qué somos?
de quien he podido aprender tanto los últimos años.
Puedo sentirme sola y estar verdaderamente sola, vacía, carenciada... o puedo disfrutar las mismas vivencias cotidianas con mi gente y sentirme realmente completa con eso.
Puedo estar enferma, como lo indican los exámenes clínicos, y padecer diariamente los síntomas propios del diagnóstico... o puedo optar por no sufrir más esos malestares y continuar con la vida que se desea vivir.
Puedo preocuparme con cada arruga que vea aparecer en mi cara... o puedo decidir permanecer joven por mucho tiempo más. Cuerpos sin edad, mentes sin tiempo. Para Deepak Chopra, nuestras células escuchan constantemente a nuestros pensamientos y se ven cambiados por ellos.
No estoy hablando entonces, de permanecer jóvenes de espíritu, o de saber sobrellevar una enfermedad, sino de hechos materialmente reales. El tiempo no existe como absoluto. Y somos muucho más que nuestro limitado cuerpo.
Y con esto no digo tampoco que se trate de repetirse a sí mismo una y otra vez -como cuando uno intenta aprenderse las tablas de multiplicar- lo que se desea ser. Simplemente se es y ya. Como diría mi amigo (gracias, el discutirlo con vos permitió el intento de ponerlo en palabras), simplemente se tiene la certeza de lo que se logrará, del lugar en que nos queremos ubicar y ya está. Hecho, materializado.
Contamos todos con un inmenso poder del que muchas veces no estamos conscientes, del que podríamos incluso sorprendernos si de repente lo aprendemos a aprovechar.
No sé si les ha ocurrido ha ustedes, pero yo he logrado percibir en un par de ocasiones, cómo el simple hecho de saber desear un cambio y tener la seguridad que sucederá ha hecho que en verdad mi realidad se modifique.
Se trata mas bien entonces, de encontrar nuestro propio equilibrio, se trata de contar con un buen estado mental. Cierro entonces con una cita más de Chopra que dice: "Puedes cambiar tu mundo, incluido tu cuerpo, simplemente cambiando tu percepción".
martes, 28 de agosto de 2007
Sobre mi búsqueda, lo que constantemente persigo... y lo que ocurre en el camino!
"Muchas personas pierden las pequeñas alegrías esperando la gran felicidad"
"Las injusticias se respaldan con el silencio cobarde de los buenos" García Salve.
"Cuando reces mueve los pies"
"Un perdedor es el que tiene tanto miedo de no ganar, que ni siquiera lo intenta"
"Cuántas cosas perdemos por miedo a perder"
"Volar es alegría, es magia... y una manera de acercarse a la Verdad" Richard Bach.
"Un obstáculo es la mejor oportunidad para dar el mayor esfuerzo"
"Si no podemos cambiar al mundo cambiemos al menos nuestra propia vida y vivámosla con libertad"
"...un bolero es mucho más importante para la humanidad que la Marsellesa, la Internacional y todos esos himnos..." Oliverio (El lado oscuro del corazón)
"No confundas el valor con el precio" La puta y la ballena.
"Yo sólo sé que nunca estamos menos solos que cuando creemos estarlo" Jaques Sagot.
"No es sólo cuestión de cuando hacer la excepción sino que también con quién hacerla"
"Mi amor es insólito, absurdo, mórbido, imposible... es decir, verdadero" Jaques Sagot.
"Quien dice amor dice delirio, exceso, locura". Jacques Sagot.
"Es mejor herido que dormido... A veces una herida te recuerda que estás vivo" Oliverio (El lado oscuro del corazón)
"No body said it was easy" Coldplay.
"No se nos otorgará la libertad externa más que en la medida exacta en que hayamos sabido, en un momento determinado, desarrollar nuestra libertad interna" Mahatma Gandhi.
domingo, 26 de agosto de 2007
¿De qué color son tus alas, mariposa?
Pero puedo responderte, amigo, lo que sí sé:
Sé que durante este tiempo, tiempo en que no he escrito y en el que pareciera haber desaparecido, las cosas no han permanecido en "stand by". Al contrario, percibo grandes transformaciones permanentemente.
Sé que mi esencia, lo que SOY, permanece, continúa. Sin embargo, a ratos me miro, y me sorprende lo que veo.
Hay cambios grandes que me han llevado a aprender y me invitan a crecer... Y el poder decir simplemente "no se" es parte de ello.
miércoles, 25 de julio de 2007
Dónde guardo...???
¿Dónde guardo tu espejo, tu cigarro?
¿Dónde guardo tu sueño tras de mí?
¿Dónde guardo tu aroma, tus enfados
y tu loca carrera por vivir?
¿Dónde guardo tu nombre de mar,
que de tarde me busca y me vuelve a encontrar?
¿Dónde guardo tantos años, tantos sueños que no fueron
más allá?
¿Dónde guardo tu voz de crucigrama,
tu nobleza, tu eterna discusión,
tu silencio, tus cuentas, tu esperanza,
la distancia que de pronto nos perdió?
¿Dónde guardo tu azúcar, tu sal
que me ha dado y robado de pronto la paz?
¿Dónde guardo tantos años, tantos sueños que no fueron
más alla?
¡Tantos años que no fueron más allá!
domingo, 15 de julio de 2007
Hablando de sexo...
Hay sexo por amor.
Sexo en cumplimiento del deber.
Sexo por el simple placer.
O quizá sexo fantaseado, aún sin realizar.
Hay sexo inesperado, apasionado...
en total entrega, y sin medidas.
O sexo tímido, rutinario, monótono,
e incluso forzado o escueto.
...y parecerá un poco cursi,
porque no siempre suceden ambas,
ni tampoco digo que es lo que debiera,
pero creo que por mucho lo supera
cuando en el sexo con amor hay tanto placer,
sea fantaseado, realizado, inesperado, inconmensurable...
...o sin mesura!
jueves, 5 de julio de 2007
Como cuando éramos niñas...
Jugar, como cuando éramos niñas, y divertirnos tal vez ya no jugando de super héroes con nuestros amigos, o haciendo manualidades, o con bolinchas, trompos, yo-yos, pero sí bailando, viendo una película o escuchando tus chistes de pícara inocencia...
Acompañarnos, como cuando éramos niñas, ya no vendiendo repostería de mami o yendo a la escuela de música o a las clases de baile con doña Marlene, pero sí compartiendo las mañanas dominicales de natación-bronceado o creando montajes coreográficos juntas...
Ayudarnos a sentirnos mejor, como cuando éramos niñas, ya no jugando yo a que eras la cocina mientras tenías fiebre, pero sí con grandes conversadas, buscando entender en lo que estamos cada una...
Soñar, como cuando éramos niñas, ya no con ser carnicera una o monja misionera la otra, pero sí planeando, por ejemplo, un viaje a Cuba juntas!!!
domingo, 1 de julio de 2007
No más...!
Sobre la ausencia-presencia del amor...
- "Amor..."
- "..."
-"¿Estás conmigo?"
- "..."
- "¿Te desangras quizás en la tinta que mi pluma golosamente dilapida? ¿No será lo que escribo otra cosa que una negra hemorragia sin fin? Poco importa. Después de todo, uno siempre escribe con sangre. ¡Y a quién se lo estoy diciendo!"
- "..."
-Lo que daría por oír nuevamente tu voz! ¡Una palabra tan solo... mi nombre!"
-"Di mi nombre, amor, y dame con ello la vida."
- "..."
Porque la locura es mi bien supremo, porque en ella te pertenezco completa, irrestrictamente, por eso quiero hoy dedicártela. Así pues, y con el permiso de don Antonio Machado: ¡A ti, amor, esta locura mía!
viernes, 29 de junio de 2007
Hoy sí... lo pongo en palabras...
¿Cómo sostener lo que pareciera inexistente y que aunque pesa no se quiere dejar? ¿Cómo voltear la mirada cuando lo que se descubrió fue realmente hermoso, digno de mirar una y otra vez, y de tenerlo cada vez más cerca? ¿Cómo abandonar lo que se desea? ¿Cómo poder hacer palpable lo que pareciera taan distante, de otra dimensión? ¿Cómo ocultar lo que con gran trabajo se logró destapar? ¿Cómo lo que es un gran salto en tu camino se convierte en tu peor pesadilla? ¿Cómo lo que podría hacerte volar se esfuma entre las sombras?
sábado, 2 de junio de 2007
Enjoying as much as children...
Entonces Mark, vos nos mencionas en tu blog los gritos de alegría de esos niños en los carros chocones; en ese instante ocupaste el lugar de espectador. Pero por qué no mencionar también todo lo que podemos disfrutar tanto como ellos. Reirse a carcajadas, gritar de emoción, hablar tan fuerte que todos nos escuchan sin darnos cuenta de lo que hacemos porque es tanta la euforia que el volumen se nos sube :) (bueno eso en mí es cotidiano). Ocupar entonces el lugar de protagonistas. Disfrutar sin inhibiciones, sin preocupaciones...
Ayer tuve la oportunidad de compartir con un grupo de chicos que se permitieron divertirse tanto como yo! Subir una y otra vez al mismo juego, terminar todos mojados sólo porque el tobogán estuvo divertido: una vez a oscuras, otro moviendo el bote para que el agua salpique más y la sensación sea más intensa, otra junto con un extraño... como fuera, la cuestión era gozar! Subir a la torre por segunda vez, aunque en la primera ocasión la sensación haya sido de que mi cuerpo y yo nos separábamos. Ir en busca de helados y algodones de azúcar (faltaron mis palomitas dulces :o( ).
"I'm like a child", dice M. al comprender que con un gesto infantil hizo su propuesta de volver a entrar al Parque de Diversiones porque aun quedaban 30 minutos antes que cerraran y ya no había prisa en volver... Yo me volví y le dije: No, sólo sos aventurero, hacer las cosas sin pensarlo tanto... genial!!! Hoy lo pienso y digo: Sí, ser como niño en eso, preocuparse menos en el resto de las cosas: tiempo, pendientes en casa, vergüenza del qué dirán... Evitar perdernos de grandes momentos por taradeces que los adultos colocamos a veces como obstáculos.
Disfrutar sin inhibirse... reírse a carcajadas, aventurarse sin pensar tanto las cosas, repetir lo que se disfruta una y otra vez y cada vez es una experiencia distinta...
Y así es como quisiera atreverme a otro resto de cosas: ir a jugar futbol con mis amigos, por ejemplo, aunque eso implique ver algunas risillas por ahí porque no lograré ser muy hábil luego de no haber jugado desde sexto grado de la escuela. Y gritar de alegría, y encontrarme con gente que desee lo mismo: Sólo disfrutar.martes, 22 de mayo de 2007
The passion of a dance...
sábado, 19 de mayo de 2007
Sin miedo
Rosana, una vez más, me recuerda el modo de vivir que me interesa en mi cotidianidad... "No abandones, continúa" -me dice ella con su canción.
Vivir a pleno, desplegar las alas y volar...Volar con la certeza que alguien vendrá hacia nosotros y juntos emprenderemos el camino de la vida -dice Silvia Palacios al describir esta su pintura.
Sin miedo sientes que la suerte está contigo
jugando con los duendes, abrigándote el camino
haciendo a cada paso lo mejor de lo vivido
mejor vivir sin miedo.
Sin miedo,
lo malo se nos va volviendo bueno
las calles se confunden con el cielo
y nos hacemos aves
sobrevolando el suelo.
Así sin miedo,
si quieres las estrellas vuelco el cielo
no hay sueños imposibles ni tan lejos
si somos como niños
sin miedo a la locura
sin miedo a sonreir.
Sin miedo,
las olas se acarician con el fuego
si alzamos bien las yemas de los dedos
podemos de puntillas
tocar el Universo.
Así sin miedo,
las manos se nos llenan de deseos
que no son imposibles ni están lejos
si somos como niños
sin miedo a la ternura
sin miedo a ser feliz.
Rosana
domingo, 13 de mayo de 2007
Una concurrida soledad...
El lado oscuro del corazón. Una película encantadora; llena de símbología, poesía, búsquedas, vuelos, sueños, anhelos, desesperanza, aprendizaje, crecimiento...
En esta ocasión incluiré uno de los poemas de Bennedetti con que Oliverio expresa su sentir; y es sintiendo -incluso el dolor, el vacío, la ausencia- que se sabe vivo, y que continúa...
ROSTRO DE VOS
Tengo una soledad tan concurrida
tan llena de nostalgia
y de rostros de vos
de adioses hace tiempo
y besos bienvenidos
de primeras de cambio
y de último vagón.
Tengo una soledad tan concurrida
que puedo organizarla
como una procesión
por colores, tamaños y promesas
por época, por tacto y por sabor;
sin un temblor de más
me abrazo a tus ausencias
que asisten y me asisten
con tu rostro de vos.
Estoy lleno de sombras,
de noches y deseos,
de risas y alguna maldición.
Mis huéspedes concurren,
concurren como sueños
con sus rencores nuevos
su falta de candor.
Yo les pongo una escoba
tras la puerta
porque quiero estar solo
con mi rostro de vos.
Pero el rostro de vos mira a otra parte
con sus ojos de amor que ya no aman
como víveres que buscan a su hambre
miran y miran
y apagan mi jornada.
Las paredes se van, queda la noche
las nostalgias se van, no queda nada
ya mi rostro de vos cierra los ojos
y es una soledad tan desolada.
Mario Bennedetti.
lunes, 7 de mayo de 2007
Cuando los otros aparecen cuando menos lo esperas... pero más lo necesitas!
El día anterior me había ocurrido algo similar: luego de haber escrito en este espacio lo que necesitaba sacar, aparece M. en el messenger e inicia una larga conversa sobre lo que recién había escrito, sin saber que yo realmente necesitaba hablar al respecto. Y que apareciera otro en ese instante que se preguntara sobre lo mismo, que se identificara con mi mal-estar, dio cabida a que al menos esa noche -o lo que quedaba de ella- pudiera dormirme sin más ni más.
Pero hoy, ¿cómo pude haberme olvidado que mi amigo me miraba por la webcam? "Apagué la cámara al propio. Por qué lloras?" -me dijo. A lo que respondí: "Es sólo que estoy sensible, ocupaba hablar con R. porque no he estado bien y él me dijo que lo llamara cuando lo necesitara...".
domingo, 6 de mayo de 2007
Quiero aprovechar lo que tengo hoy, sin esperar, sin detenerme...
Quisiera volar mucho mas rápido y más alto de lo que estoy haciéndolo, quisiera recorrer tantos parajes, tantos sitios, tantos cielos… y si la vida no me alcanza para hacer todo lo que quiero?
Asociación libre
“Dime el tema de tu tesis y te diré de qué careces” repitió Mariano Fernández durante todo el semestre en el que fui su alumna.
“Relaciones de poder entre los géneros y su influencia en las manifestaciones de violencia en las relaciones de noviazgo adolescente” le contestaría yo, aunque en realidad es el tema de mi aún incompleto anteproyecto.
Y es que ahora veo que dejar atrás este tema significa haberlo enfrentado todo, completo, afrontando cada detalle, cada cosa que golpea...
La violencia y el abuso sexual son temas que la mayoría van a reprobar si se les pregunta por su opinión al respecto.
Pero yo, yo odio a los “macho” men, por ejemplo, por más sutil que sea su forma de externarlo… y lo peor es que los encuentro por todos lados, están por donde quiera que pase...
Me escalofría un pleito entre maes por una mujer o un partido de fútbol…
Me da tristeza (de esa de verdad, de esa que cala) ver a las chicas tan orgullosas de su implante de senos (en los que se asemejan a Yayita la novia de Condorito) que viven en función de ellos…
Y entonces me pienso sola, desubicada, no se si estoy en el lugar o en la época equivocada, pero los encuentros entre géneros me son tan ajenos…
Lo que cada uno busca es tan distinto! Veo a las “disparejas” (porque solo así los podría nombrar) y encuentro que se piensan cerca pero la verdad mientras uno habla desde el polo norte el otro se encuentra en el polo sur.
Por qué no abandonar cada uno esos lugares –que de por sí son tan fríos y desolados- y optar por irse a vivir juntos al trópico?
He planteado tantas respuestas a esto, y la verdad ninguna me termina de convencer… Tal vez porque el problema no sea de convencimiento, sino de deseo. Cuánto me encantaría tener respuesta para el cuándo o el cómo las cosas van a cambiar…
jueves, 3 de mayo de 2007
Un cuento al amor (un espacio para el deseo)
Alguna vez un amigo me solicitaba constantemente contarle un cuento con un final feliz.
Luego de escuchar por mucho tiempo su petición lo complací con el cuento... aunque le quedara debiendo el final feliz.
Ahora lo complazco publicando el cuento.
El mundo está lleno de imposibles... deseos imposibles y fantasías no realizadas!
En un cuento todo es permitido, sin embargo, éste no tiene un final feliz. Vivimos buscando realizar esos sueños, lograr la perfección, y de pronto es en la imperfección donde muchas veces nos encontramos, donde logramos sentir; es la incompletud la que nos permite vivir. Y mi vida sólo puede escribir sobre esto: anhelos deseados e inconclusos, sueños soñados e imposibles... al final eso es un sueño: espejismos, alucinaciones, fantasías, ilusiones...
Érase una joven soñadora, atrevida, luchadora... algunas veces calculadora y fuerte, pero en esta ocasión frágil, sensible y tolerable pues amó, creyó y se dio espacio para perder... perder lo suyo para ganar lo del otro; no cualquier otro, su otro, su amor... Quien ama pierde para ganar, y ella no fue la excepción, cedió lo suyo para ganar amor: cariño, ternura... recuperar deseos que por tiempos no había sentido... y amó, amó tanto que ya no sabía cómo no consumirse en este intento de gozo.
¿Y por qué no hacerlo? Amar no duele, ¿o si? ¡Cuán equivocada! Sin embargo deseaba amar, no a cualquiera... amar a quien fuera su pareja, a quien ella misma había colocado en ese lugar: a su lado...
Amar no basta. ¡Cómo puede esto ser posible! Sin embargo, ella sabía que amar no había sido suficiente... Ella lo percibía pues reconocía lo mucho que él la amaba, conocía de la inmensidad de deseo de su otro, lo había sentido soñarla, acariciarla, apetecerla, derrocharla... No obstante, ahí estaba ahogándose, el asma la acababa, la agotaba, ese hueco en su pecho, esa falta de aire... esa falta...
domingo, 29 de abril de 2007
Buscar sin necesidad
Más aún colocándolo en este espacio...
A quien amo, busco y deseo…
…sin necesitarlo.
A quien deseo –aunque no me necesite-
me busque eternamente.
Te busco
pero sé que puedo sola,
sé que he construido cosas para mí
y ahora deseo compartirlas.
Te necesito
pero no porque sin tí no sabría que hacer
sino porque bailar, cantar, compartir, conversar
a tu lado siempre ha sido hermoso.
Te deseo
no porque sólo tú puedas hacerme sentir
sino porque lo que sentimos, compartimos y soñamos
hace desear al otro por siempre.
Te amo
no porque tú eres quien llena toda mi vida
pero sí porque tu olor, tu calor, tus cariños
recuerdan todos los momentos vividos juntos.
Y así,
quiero que me necesites sin depender de mí,
que me desees sin responsabilizarme de tu felicidad
que me ames sin restringirnos
y que me busques… cuando ya no me necesites.
martes, 24 de abril de 2007
Dos décadas atrás
De: Nísida Marchena
Recuerdos.
Que Dios la bendiga.
19-04-2007
Sé que ella –mi maestra de primer grado: la niña Nísida- ha tenido un cariño especial por mí desde cuando fuimos maestra/alumna y que pregunta por mí al encontrarse con mi padre por las calles de Santa Cruz. Pero que llegara al trabajo de papi a pedirle exclusivamente que me entregara un pedazo de hoja en el que escribí en 1987 un dictado hecho por ella fue algo que me caló. Al recibir la noticia de ese recuerdo guardado por 20 años hizo que me conmoviera y me hiciera pensar entonces en lo que –como antes les dije- sí es una historia común: la del aprecio de una alumna por su maestra.
Y es que había olvidado tantas cosas! Ella rompió con lo común y evitó rigidizar normas. Hizo desde las cosas más grandes como defenderme de un intento de abuso de uno de mis compañeros, hasta los detalles más pequeños pero tan importantes para mí como aquel.
Aparecen un par de estas pequeñas grandes historias. Una fue la vez que detestando yo los baños de la escuela y habiendo aguantado ya demasiado tiempo, las ganas de orinar fueron incontrolables. La maestra pregunta por el motivo del chorro en el suelo y de inmediato dice en voz alta: “Debe ser que se les puso mucha agua a las plantas y se está regando” y le pide a una de mis compañeras (pobre!!!) que limpie el reguero. Creyendo yo que había podido engañar -con mi silencio- hasta a la maestra de lo realmente acontecido, me voy lo más pronto posible de regreso a casa. Mi sorpresa fue cuando la niña le contó la historia a mami y supe de su disimulo frente a mis compañeros.
Un segundo momento importante se dio al recibir un examen de matemáticas en el que la calificación era un 100. Recibo el examen y la niña me indica que hice unas operaciones con suma cuando las indicaciones pedían restar. Me señaló que por mi trabajo cotidiano estaba segura de mis conocimientos y me pedía que estuviera más atenta a lo pedido para la próxima ocasión.
De esta y muchas otras formas, la niña Nísida me mostró que creía en mí, en mi capacidad. De esta forma esa niña pequeñita, flaca y muuy callada, fue descubriendo sus habilidades, buscando colaborar con los que lo necesitaran y evitando exponerlos, vulnerabilizarlos frente a los demás.
Estoy segura que hasta las historias corrientes, repetidas, cotidianas –como lo es el cariño hacia la primer maestra de primaria- son dignas de contar.
Paternidad inusual
Al verlos hoy a ambos en la reunión familiar de los Ulate, me acerco a saludarlos y conversar un rato con él. Me gusta dialogar con él desde que fui a impartir unos talleres a parejas en la parroquia donde él antes trabajaba. Vamos entonces mi prima y yo a saludarlo. Y es cuando damos inicio al tema:
Prima: Puede creer que yo no conocía a su hija (que ahora tiene como 7 años tal vez).
Primo: De veras? Ella es Sherim.
Prima: Se parece mucho a usted.
Primo: Sí, esta parte de los ojos –dice señalándola. Monseñor me dice: Qué hubieras hecho si se te hubiera ocurrido negarla. (Risas)
El me parece una persona muy valiente, que ha hecho todo lo posible por hacer las cosas de la mejor manera, pensando en lo que podría ser mejor para su hija y la madre de ella, sin olvidarse a final de cuentas de sus propias metas, sus propios caminos. Muy a pesar del fuerte choque que fue para muchos en la familia y a pesar de todas las críticas del pueblo natal de ambos, donde él incluso trabajaba en ese momento.
Digamos que puedo ver claramente el espacio que él le abre a Sherim para darle su lugar como hija. Para honrarla y amarla. Y puedo ver también cómo la familia Ulate ha aprendido y madurado con esta historia. Pero, …y el resto? Los demás? Los que se supone que están afuera pero que rodean a Sherim y conocen su historia origen? A su edad imagino que ya no es un “¿que sucederá?”; ya habrá tenido que enfrentarse a esto con sus amigos de escuela. En el kinder siempre se habla de la profesión de los padres.
¿Cuáles serán las palabras de Sherim frente a su gente, a sus amigos y conocidos? Cómo significa ella esa historia que su padre, al presentarse, expresa como:
- Soy sacerdote. Tengo también una hija, -la abraza- Sherim. Su madre es de acá mismo, con todas las implicaciones que eso ha tenido…
Sobre la espera II
Y así en este instante estoy con el plan B de la noche: escribir.
Sobre la espera
Pero luego maduré la reflexión. Hay algo que hace distinta a esta espera. Una espera esperanzadora. Una espera que habla y me dice que algo muy bueno está por venir. Y que se acerca. Que no es ilusión. No es un espejismo. Esta vez no es un engaño, ni un sabotaje. Algo grande se está acercando, y se oye el retumbar del suelo en cada paso… y avanza.
Antes –pensé- se erizaba la piel con el sólo imaginar que alguna vez despertara y buscara aproximarse. “Y si no me ve o no se mide y al avanzar me aplastara?” “Y si brincando de felicidad al verme, busca jugar conmigo y sin querer me lastima al hacerme un cariño?
En cambio ahora que se acerca, que se siente muy cerca, y que yo misma me he acercado, la espera de tenerlo de frente, de estar frente a frente, se hace taaan larga. Ese retumbo –ahora lo sé- no es porque es gigantesco ni monstruoso, sino porque es firme en su andar. Es seguro en su marcha. Sabe lo que quiere y hacia dónde se dirige. Por qué entonces tarda tanto en llegar?
Ahora sé que quien se acerca no es mi enemigo. Ni soy yo –para sorpresa de otros- el monstruo devora-todo de lo que se está por acercar. (Eso de ser grande o pequeño, malévolo o inofensivo, manso o guerrero es tan relativo!!!)
Sé que ambos nos acercamos en busca de la mirada del otro y que al estar frente a frente ninguno tendrá que inclinarse para mirarse a los ojos. Lo sé porque lo he recordado. Recordé (porque hay cosas que por alguna razón se omiten o se llevan al olvido) que ya antes ha estado tan cerca que lo he podido ver, y oler, y tocar de muchas formas y en muchos momentos. Eso me hace esperar.
Y fue llegado a este punto que comprendí que la larva en su crisálida no se halla en una espera malograda, es una espera con un propósito claro, una espera transformadora. Ella sabe que pronto se convertirá en mariposa.
martes, 10 de abril de 2007
Adquiriendo compromiso con la palabra
Soy yo. Diciendo lo que creo, lo que siento, lo que sufro. Por lo que lucho. Por lo que vivo. Soy yo hablando de lo que me hace sentir viva y lo que me podría acabar. Soy yo expresando mis temores, mis dudas, mis preguntas. No importa se les parezco cursi. No importa si sueno muy beligerante. No importa si creen que soy fría, o que estoy loca de remate.
Soy yo, adquiriendo compromiso con mi palabra. Una palabra que ya no desgasta. La misma palabra que antes cansaba sostener y que ahora deleita. Mi palabra. La mía. De nadie más. Acá estoy yo sosteniendo mis sentires, mis creencias, mis ideas. Dejando evidencia de lo que soy, y que luego serán rastros de lo que fui. Soy yo exponiendo a los otros, a ustedes, mis luchas/temores/dudas/sueños. Soy yo exponiéndome.
Soy yo sosteniendo mi decir, aunque más adelante me lean y encuentren contradicciones en mi discurso, entre un discurso y otro. Si yo -al releerme- encontrara tales contradicciones, estaría muy satisfecha de ello, porque al final de eso se trata: de crear un cambio con la palabra. De ampliar visión y enriquecerse. De dialogar con otros y tomar lo que se reciba, lo que se te devuelva, para crear otra cosa, algo nuevo. Lo que se dijo y algo más, debiera salir de la escritura y del intercambio de palabras con otros.
Esta soy yo adquiriendo compromiso con la palabra.
domingo, 8 de abril de 2007
Cantos de amor y vida II
Yo te ofrezco...
Yo te ofrezco el resto de las luchas de mi vida
yo te ofrezco la senda que me queda por andar
y hacer mías tus cosas más profundas y sentidas
El amor...
Si el amor se posa en tu ventana
Si el amor una tarde te confiesa
Si el amor se posa en tu ventana
Si el amor alza el vuelo con el viento
______________________________________________________________________
José Martí
Eva sale a cazar en celo
Eva no intenta vestir de tul
Eva sale a cazar en celo
Eva sale y remonta vuelo
Eva deja de ser costilla.
¿Deseada o temida?
sábado, 7 de abril de 2007
Impulso creador
A eso impulsas.
Nunca sentí tanto
Tantos sentires: sentir el baile, sentir la humedad, sentir dolor, amor, pena... Tantos por quién y por qué sentir...
...y saber que recién descubro que esta gama de sentires es -aunque no parecía- la mas intensa, la más profunda...!
Una locura contagiosa
De repente apareces con tu locura y pretendes dar vuelta a todo: propones desordenar, evitas definir como debe ser (¿se debe?) el principio y cuál sería el fin, quitas etiquetas a lo que intento poner nombre. Violas reglas, horarios, tiempo, protocolos...
Y de pronto: ¡todo está mal!!! Trato de organizar las cosas, colocar todo en su lugar... y resulta que ya no es posible! Tengo al mundo que me rodea encima, suplicando reordene este desorden que no soportan ver y que temen se extienda... pero no es posible ya rearmar las cosas. Imposible. El orden en que estaba todo pareciera no tener sentido ya, no necesariamente debiera estar ahí y en cambio podría estar cualquier cosa.
"Para saber qué quieres colocar ahí, sólo tienes que lanzarte de pique y atrapar lo que te parezca fascinante", me dices. Y cuando se sintió alguna vez esa adrenalina al lanzarse al vacío, no es posible dejar de buscar sentirla.
Traté -de verdad que lo hice- poner todo en su lugar, como corresponde. Y te presenté a los demás como el loco. No yo. Tú. Pero esa locura -que aún no tiene nombre ni me importa- es realmente contagiosa. Porque quien la vivió alguna vez, quien experimentó esa euforia, esa energía, retorna en busca de ese estado en algún momento de su vida...
Y entonces, para sentir de nuevo, me permito, al igual que tú, romper reglas de protocolo, tiempo y lugar. Y descubro que todo está bien! Y que el loco a mi lado puede ser un compa de viaje genial, que se permite soñar como siempre quise, que se propone cruzar montañas, cielos y mares como ahora quiero.
Para el resto podríamos ser un par de locos que no saben lo que hacen. Para nosotros es vivir.
Convertirse en dueño de su propio destino
Puede que existan ciertas condiciones -llámese patriarcado, historia familiar, compulsión a la repetición o cualquier otro- que opaquen la gama de opciones con que se cuenta, pero debemos saber que son a final de cuentas eso: una opción. Y como tal, podemos decidir por algo diferente, algo que nos acerque más a la felicidad, a la libertad...
"Seré feliz cuando mi hijo madure", "podré estar bien cuando mi esposo cambie", "si tan sólo mi madre creyera en mí...", "el día que me quieras..", son sólo excusas para quedarnos atrapados en el confort que produce el ¡pobre de mí! El "qué lastima pero adiós" de Julieta Venegas pareciera mucho mejor que la frase que algunos cristianos han distorsionado y por lo que aceptan seguir "cargando la cruz a cuestas".
El romper con las barreras de lo mismo, y que nos atrevemos llamar destino, no es tarea fácil; puede incluso llegar a ser un tanto doloroso, pero estoy segura que da cabida a algo mucho mejor!
miércoles, 4 de abril de 2007
Escritura y movimiento
Con la escritura intento poner en evidencia lo que mi cuerpo, alma y corazón intentan expresar, intentan ser. Con la escritura se expresa qué de la vida te enfada y qué amas del vivir. Por un momento pensé que mi dificultad con la escritura podría radicar precisamente en eso: poner en evidencia, abrirse, exponerse...
Al leer el blog de un amigo pensé -al igual que él- que efectivamente el lector, inevitablemente hace un intento - un tanto voyeurista- por saber qué del otro: quién está detrás de esas palabras y por qué las escribió.
Pero igualmente el baile permite mostrarse tal cual se es. Se puede expresar dolor sin decir: "estoy triste", o expresar pasión sin limitarlo a un simple "te amo" o "te deseo". Y es posible acabar llorando... o amando más! Porque el cuerpo ahí, en ese instante, siente, vive, se libera.
¿Qué me hace entonces temerle más a la escritura que al baile? ¿Por qué mi cuerpo le apuesta tanto al movimiento? En ambos casos, al poner punto final en un escrito o al hacer el último movimiento con la música, se cierra el escrito/danza pero se percibe aún abierto el pecho de par en par.
A final de cuentas, ya nada me detiene de continuar -a pesar de sentir temor- expresándome, diciendo a otro -cualquier otro- lo que soy, lo que siento, lo que quiero cambiar y lo que quiero sostener...
Hace algún tiempo ya que leí esta frase con la que cierro -el texto pero ni mo pecho- y que me hizo reaccionar: "Los barcos en el puerto están a salvo pero no se hicieron para eso".
¿Tendré algo para decir?
En la cotidianidad es similar: haces y dices aunque no siempre hay un otro que desee escuchar o hacer con vos. Eso no implica que se deba dejar de ser coherente con lo que se cree, o que haya que silenciarse o dejar de actuar, de accionar. Es más, quién quita un quite, y por ahí aparece -porque apoya o contradice- alguien que le interese argumentar, agregar a lo que dices, interactuar con vos...