De cuando el cuerpo se despierta… y el espíritu vuela!

A quien inspira estas palabras, a mi compañero de vida…

Cuando ya no se está a la espera… cuando ya no se asume la carga del otro… cuando ya no se piensa que se cuenta con una condena a la soledad... cuando ni siquiera se piensa uno mismo como carga… cuando se vive en libertad sabiéndote acompañado… cuando aparece otro que, además de buscar vivir en libertad, desea construirla contigo… cuando ya son dos abriendo camino (cosa que para cada uno no es fácil pero es mucho más probable elaborarlo junto a otro)… en ese instante el cuerpo también se libera de ataduras, el cuerpo –antojado por lo que vive el espíritu- vuelve a sentir… avanza sin dificultad, sin desequilibrios… cuerpo y espíritu se mueven como siempre lo quisieron!