domingo, 13 de mayo de 2007

Una concurrida soledad...


El lado oscuro del corazón. Una película encantadora; llena de símbología, poesía, búsquedas, vuelos, sueños, anhelos, desesperanza, aprendizaje, crecimiento...
En esta ocasión incluiré uno de los poemas de Bennedetti con que Oliverio expresa su sentir; y es sintiendo -incluso el dolor, el vacío, la ausencia- que se sabe vivo, y que continúa...


ROSTRO DE VOS

Tengo una soledad tan concurrida
tan llena de nostalgia
y de rostros de vos
de adioses hace tiempo
y besos bienvenidos
de primeras de cambio
y de último vagón.
Tengo una soledad tan concurrida
que puedo organizarla
como una procesión
por colores, tamaños y promesas
por época, por tacto y por sabor;
sin un temblor de más
me abrazo a tus ausencias
que asisten y me asisten
con tu rostro de vos.
Estoy lleno de sombras,
de noches y deseos,
de risas y alguna maldición.
Mis huéspedes concurren,
concurren como sueños
con sus rencores nuevos
su falta de candor.
Yo les pongo una escoba
tras la puerta
porque quiero estar solo
con mi rostro de vos.
Pero el rostro de vos mira a otra parte
con sus ojos de amor que ya no aman
como víveres que buscan a su hambre
miran y miran
y apagan mi jornada.
Las paredes se van, queda la noche
las nostalgias se van, no queda nada
ya mi rostro de vos cierra los ojos
y es una soledad tan desolada.

Mario Bennedetti.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No recordaba este poema, ya hace tanto tiempo visitado, por uno que parece que no era yo. Impresionante, los cambios de sitio, los que leyeron, los que leen y los que leerán.

Amorexia. dijo...

Maravilloso maestro Bennedetti, hermoso el lado oscuro...